domingo, 7 de noviembre de 2010

Reinvenciones

De nada sirve debatir en torno a la utilidad del conocimiento acumulado para afrontar los nuevos retos. Si alguien ha pensado que podemos deshacernos con un chasquido de dedos de todo lo aprendido está totalmente equivocado. Si alguna cosa sabemos de nuestro cerebro es que desecha poco y acumula capas sucesivas a lo ya aprendido. Desaprender consiste en echar paladas de nuevo conocimiento a lo que ya existe y que permanece allí…como mucho sin que se note. No existe otro programa de desinstalación de contenidos que no sea la demencia

Ante esto, discutir si cabe o no prescindir de lo que ya conocemos es un poco querer rizar el rizo y echar más palabras a este inmenso vertedero lleno ya de ellas…imposible ver algo con una mirada nueva e ignorante de lo que ya ha visto. Todo se construye sobre capas tectónicas de innovación anterior.

Pero, aún así, el momento actual exige de metodologías, capacidades y puntos de vista absolutamente nuevos y por descubrir que no se corresponden con las herramientas de las que disponemos para crearlas. Mucho me temo que poco de lo anterior nos servirá en este nuevo entorno. No hay vuelta atrás y si de alguna cosa nos ha de servir el conocimiento acumulado es para no volver a repetir lo que ya sabemos a dónde nos conduce. Todo parece indicarnos que hemos de reinventarnos, pero… ¿Cómo?

Ahora que se habla de tiempos líquidos y de su incidencia en aspectos como la planificación o la gestión y el desarrollo de los equipos y de las personas, me pregunto cuán líquidos somos nosotros, los profesionales que nos dedicamos a asesorar, formar o a orientar y cuán líquidas son nuestras metodologías y técnicas como para adaptarse a este nuevo escenario donde parece haberse instalado perennemente lo transitorio.

8 comentarios:

  1. Reinventarnos, es una palabra que últimamente leo mucho, pero ¿nos conocemos suficiente?¿a lo mejor reinventarse consiste en mirar-nos de otra manera? ....
    Mi sensación es que "todo" está inventado. ¿Has visto a los chiquillos jugar con las cosas? es fascinante jamás las utilizan para lo que se supone que son ....
    Tal vez, y solo tal vez, esa es la forma de reinventarse ....
    Tal vez, y solo tal vez, esa es la forma de recuperar-se
    Tal vez tengamos que reencontrarnos con eso que guardamos en nuestro interior, desde hace "demasiado" tiempo, y lo pongamos a imaginar, a crear .... a enloquecer de dicha .....
    Tal vez, y solo tal vez, necesitamos recuperar esa locura infantil, pero desde la madurez que dan los años.

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  2. ¡Pues vaya dilema! Ahora que había descartado la consultoría en estado sólido (y apelmazante) y la consultoría gaseosa (que entra en las organizaciones y se expande hasta ocupar todo el espacio disponible), pues sólo nos queda ser líquidos. Pero, ¿hasta que punto? Estoy de acuerdo en desaprender, pero para ello es requisito previo [algo que olvidan los defensores a ultranza de lo efímero] haber aprendido alguna cosa.

    Creo que voy a apostar por ser una consultora-granizado: a caballo entre imaginar que solidifico algo que -a base de darle vueltas- se acaba deshaciendo. Y vuelta a intentarlo. ;-)

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  3. "todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar" y al pasar nos vamos reinventando. Poco a poco, con cada piedra del camino, con cada sonrisa que amablemente se cruza en nuestro devenir, nos vamos reconstruyendo, reescribiendo nuestra historia particular, de manera que nunca más somos la misma persona. Se puede ser más "líquido"?

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  4. Como estás Manel
    Me da gusto saludarte!!

    Más allá de la intenciones de empresarios y personas en general, la reinvención no proviene del deseo, sino de la necesidad.

    Para virar 180º es preciso "encontrarse" con un muro.

    Estoy convencido que cuando los Reyes aceptaron el proyecto de Colón de buscar las Indias por mar, sabían que por tierra, al menos, corrían con las mismas incertidumbres.
    Un abrazo.

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  5. @Juana, Es muy atractivo lo que dices tal cual lo dices. Creo que te entiendo y comprendo la aproximación que sugieres. Pero, por eso, me parece harto difícil. Mucho más de lo que me imaginaba…Hay algo que no logro integrar…ese recuperar la locura con la madurez…Para mí, la gran locura de la infancia se desarrolla sobre los cimientos de querer ser mayor para tener libertad para ser loco…No niegan nada porque desconocen. Una vez que ya sabes de qué va la fiesta…
    Continuo pensando en tus palabras
    :-)

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  6. @Anna. Una cosa, no creo que se interprete del post que defiendo lo efímero [sinceramente no me atrevería a defender ni eso ni lo contrario], más bien me preocupa que, nos guste o no [se defienda eso o lo contrario] la incertidumbre global no tan solo afecta decisiones de tipo macro sino que infecta los rincones más recónditos de nuestro trabajo y me cuestionaba si estábamos a la altura como para incorporarlo a nuestros proyectos… Veo que tú has encontrado una opción como mínimo refrescante… Me quedo con ella.
    Un abrazo,

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  7. @Joanka. Pura agua!! Entiendo que me estás diciendo que “tiempo al tiempo”, ¿verdad?

    De acuerdo, me quedo con tu optimismo mientras observo maravillado como se licuan mis dedos entre el teclado y corren prestos a unirse, junto a muchos más, con las olas del mar… Un abrazo Joanka.

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  8. @Daniel, Pero según parece hace más tiempo que nos hemos topado con ese muro del tiempo que hace que se habla de crisis. A veces tengo la sensación de que nos topamos con el muro y seguimos caminando pegad@s a él, por todo lo largo.

    Me ha encantado volver a verte por aquí! Un abrazo,

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