Eran las 4:37 de la madrugada cuando se me ha revelado la solución a un enigma que me había planteado hace unos días y que decidí dejar de lado hasta que tuviera más tiempo para reflexionar y resolverlo.
Pero, así, de repente, ha aparecido ante mí la solución contoneándose graciosa ante lo que debía ser, en aquel momento, mi adormilada estupefacción.
Después de comprobar que efectivamente tenía los ojos abiertos como platos y que no se trataba de una tontería más de mi agitada vida onírica, he tomado la primera decisión del día que ha consistido en levantarme y anotar la idea, no sea que se colara por cualquier intersticio de una de mis fases REM, que ya se sabe que este tipo de apariciones son muy huidizas y hay que agarrarlas por los pelos.
Y así, al cabo de un rato, me he encontrado ante el ordenador preguntándome por qué extraño mecanismo el cerebro continúa dándole vueltas a las cosas sin que yo, personalmente, le preste la más mínima atención y cuando creo, además, haber decidido otra cosa.
Y me ha parecido que, en una situación normal, hubiera intentando relacionar aquella idea reveladora con algo que me pasara o hubiera ocurrido en aquel momento, estando totalmente equivocado ya que no sería más que el resultado de un proceso más o menos largo que empezó en el mismo momento en que me planteé el interrogante y en el que el cerebro, dale que te dale, no ha parado hasta dar con la solución.
Y me he dado cuenta de que si esto pasa con cada cosa que dejo pendiente, debo tener el cerebro en total ebullición, con un montón de “soluciones cargándose” mientras yo ando por la vida creyéndome totalmente ajeno a esta actividad, buscando infructuosamente una tranquilidad que ya me parece imposible y preguntándome la causa de este cansancio mental, otro interrogante del que ya estoy esbozando la respuesta en este post…
Los antiguos sabian que los sueños lúcidos o el "ensueño" o .... eran muy importantes. Si se lee la Biblia, a Castaneda, o escuchas a Sesha .... cualquier referencia de gente que sabe bastante de esto que llamamos Vida, podemos concluir que el "mundo racional" no es el único mundo, ni siquiera el que lo resuelve todo ....
ResponderEliminarLo difícil de "esos" mundos (que también son nuestros, humanos y sabios) es saberles sacar todo el partido ....
Ya nos contarás .... tengo verdadera fascinación por los sueños .... y esa también es una larga historia jeje
Deja "suelta" tu mente, no la controles con el "intelecto" te sorprenderá, y haces bien en apuntar lo que te sugiera, si no lo apuntas se te escapa .... dejate llevar ....
Pues eso parece, que nuestros cerebros no descansan nunca.. así, ¿quién no va a vivir estresado?!!
ResponderEliminarPero bueno, siéntete privilegiado de poder decir que tu cerebro funciona y va resolviendo los problemas cuando tu no te das ni cuenta... es como tener un disco duro externo enchufado y que te vaya resolviendo las cosas... Esta muy bien esto, eh! Pero me pregunto, si dices que tu cerebro sigue activo, mientras tu estas ajeno a todo este tipo de actividad, ¿quién eres tu sino tu cerebro?
jeje.. en fin, podría empezar con este mítico debate filosófico... pero creo que no procede empezar con el tema este que nunca acabaría!!!
Nos vemos pasado mañana!
Besos,
Sara!
PD: Yo de ti le diría a tu cerebro que cuando le de por resolver problemas lo haga en otro momento, que las 4:30 de la madrugada no son horas!!!
Buenas noches, digo, buenas tardes:-).
ResponderEliminarNo sólo me encanta este post, sino que además compartimos esta "onírica" experiencia; últimamente, tras ciertos "hervores" (no es que me falte un hervor, o sí, no sé) que me dan vueltas a lo largo del día, suele ser mientras duermo y me despierto de madrugada, a estas horas intempestivas de las que hablas, en las que me vienen versos increíbles, que ni en sueños; ahora me vienen versos, hace un tiempo me surgían ideas y proyectos (fases de la vida...); el problema es que se me escapan del mismo modo en que me vienen, pues cansada de empuñar a oscuras y con los ojos cerrados un lápiz en un trozo de papel, he optado por no estar toda la noche apuntando frases. En fin, que el cerebro es complicado. Lo importante es que las ideas fluyan y, como te han comentado, que des con soluciones.
Un beso.
El bueno de Amalio te diría sin duda que has sido víctima -afortunada- de la serendipia en su estado más puro. Veo que además el buen hábito de GTD de "vaciar tu mente" te ha permitido sacarle buen partido :-)
ResponderEliminarUn abrazo
@Juana, Voy a ver si puedo hacerte caso y escaqueo a la mente del intelecto, si es que alguna vez logro distinguirlos totalmente ya que gustan disfrazarse el uno del otro y viceversa…
ResponderEliminarUna ingeniera soñadora…bonito y curioso combinado…
@Sara, Eso debería hacer…hablar seriamente un día de esos con él…aunque no sé si va a prestarme mucha atención de tan ocupado que está haciendo de las suyas…
ResponderEliminar@Begoña, ¿Y dormir sin resolver nada? Y… ¿qué hay de despertarse y ni acordarse tan siquiera de lo que se ha soñado? Ahhh…aquellos deliciosos tiempos de juventud… Así que “hervores”…;-)
ResponderEliminar@JM Bolivar, No me digas!! Así que he dormido con esa señora… ¿cómo dices que se llama? Serendi… :-)
ResponderEliminarSí, la verdad es que nunca me ha dado pereza levantarme y tomar anotaciones de aquello que va apareciendo. Mucho mejor que no que vaya dándote voluntaria o involuntariamente vueltas en la cabeza. Lo mismo ocurre con los post…¿no te pasa a ti que a veces se te ocurre una idea para escribir mientras llevas a cabo otra actividad? De ahí la libretita que solemos llevar encima ¿no?
Por cierto, leyéndote [y alguna vez escuchándote] sé que todavía me queda mucho que aprender de GTD…
Un abrazo José Miguel!!