Dándole vueltas a las ideas para, más que nada, despistarme de mis obligaciones, me ha parecido conveniente definir aquellos valores que quiero que caractericen el modelo de consultoría en el que me he instalado recientemente.
Además, creo que este ejercicio es coherente con dos aspectos:
El primero de ellos es aplicarme el cuento de uno de mis posts anteriores, eso sí, con una metodología distinta por no ser legión y afrontar este nuevo período en solitario.
El otro forma parte de una conversación reciente con un ex socio y en cambio amigo en la cual planteábamos redactar lo que podría configurarse, a la larga, como un manifiesto de la consultoría artesana [con el permiso y colaboración de los consultores artesanos ¡claro!]
Los valores que [me] propongo son:
Artesanía: Trabajar desde la realidad del cliente y confeccionar a medida de la organización a partir de su propia realidad y de los materiales disponibles en el momento [apartarse de la producción Prêt-à-porter].
Autonomía: Buscar en todo momento la independencia del cliente respecto al desarrollo y/o utilización del servicio/producto ofertado.
Inmediatez: Reducir al mínimo el tiempo de respuesta tanto en la atención de la demanda como en cualquier momento del desarrollo del proyecto.
Sostenibilidad: Cooperar activamente en aquellos aspectos directamente relacionados con el mantenimiento y la mejora del mundo en el que queremos vivir y legar.
Utilidad: Ofrecer en todo momento una respuesta a la medida de las necesidades y expectativas del cliente.
Bueno…, se trata de un primer redactado…
Además, creo que este ejercicio es coherente con dos aspectos:
El primero de ellos es aplicarme el cuento de uno de mis posts anteriores, eso sí, con una metodología distinta por no ser legión y afrontar este nuevo período en solitario.
El otro forma parte de una conversación reciente con un ex socio y en cambio amigo en la cual planteábamos redactar lo que podría configurarse, a la larga, como un manifiesto de la consultoría artesana [con el permiso y colaboración de los consultores artesanos ¡claro!]
Los valores que [me] propongo son:
Artesanía: Trabajar desde la realidad del cliente y confeccionar a medida de la organización a partir de su propia realidad y de los materiales disponibles en el momento [apartarse de la producción Prêt-à-porter].
Autonomía: Buscar en todo momento la independencia del cliente respecto al desarrollo y/o utilización del servicio/producto ofertado.
Inmediatez: Reducir al mínimo el tiempo de respuesta tanto en la atención de la demanda como en cualquier momento del desarrollo del proyecto.
Sostenibilidad: Cooperar activamente en aquellos aspectos directamente relacionados con el mantenimiento y la mejora del mundo en el que queremos vivir y legar.
Utilidad: Ofrecer en todo momento una respuesta a la medida de las necesidades y expectativas del cliente.
Bueno…, se trata de un primer redactado…
Me apunto. Algunas observaciones a bote pronto:
ResponderEliminarLo de inmediatez... hay cosas que no necesitan de esa rapidez, que incluso puede que sea recomendable retardar un poco. Ayer mismo me encontré con que para evitar ser catalogado como consultor "bombero" en lugar de artesano, he tenido que frenar la respuesta como un ejercicio de mínima disciplina. Quizá deberíamos substituirlo por "contingencia" o "sincronización", más relacionados con tempos correctos que con carreras.
A la Utilidad le veo un problema, o es un criterio subjetivo por parte del consultor o del cliente o se sobrentiende ¿no? En ocasiones, he tenido que cambiar las expectativas del cliente (y lo que creía él que eran sus necesidades) y convencerle de que lo útil era otra cosa. Lo he hecho por que creía que le estaba beneficiando con el cambio y, de hecho, si se hubiese empecinado con su primera demanda quizá debería haberle derivado a otro consultor.
Lo de Sostenibilidad, lo siento pero me parece una palabra de ésas que están de moda y pasarán a ser malditas en poco tiempo. Entiendo el mensaje, pero no me gusta el nombre ¿Y si, simplemente, le llamamos "Responsabilidad"?
Y un valor ¿nuevo? Honestidad: Ofrecer lo que sabemos hacer y derivar a quién sepa lo que no alcanzamos a saber hacer.
Sostenible/Responsable son dos adjetivos que precisan aplicarse de forma complementaria y coordenada, pues se necesitan mútuamente.
ResponderEliminarEn turismo, que es el sector que estoy estudiando actualmente, cuando se habla de turismo sostenible se refiere siempre a actuaciones en destino, a la gestión de recursos territoriales. Mientras que cuando se habla de turismo responsable o viajes responsables se está hablando en todo momento del mercado, de todo lo referente a los viajeros.
Evidentemente, no hay uno sin el otro, se necesitan ambas cosas por igual, estamos hablando de dos enfoques sobre un mismo hecho o realidad.
Me imagino que lo mismo aplicará cuando hablamos de otros sectores. Dependiendo de si las actuaciones se centran en la gestión o en el mercado podremos hablar de sostenibilidad o de responsabilidad.
Bonito tema. Me gustan los valores artesanos.
Un buen apunte inicial. Así, en frío, creo que el beneficio principal que te va a reportar es el hecho de disponer de una guía para recordar, atendiendo a que no vas a disponer de legión que te acompañe y te reubique si te despistas del camino.
ResponderEliminarDe los que apuntas, me gusta "artesanía". Marca el esqueleto de lo que está por venir. De acuerdo com mkl en lo de inmediatez. Entiendo lo que quieres expresar, pero el término que has escogido transmite prisas y no ritmo o cadencia. Por contra, sí apuesto por la sostenibilidad tal como la enuncias, pero también en un sentido más interno: soluciones y decisiones sostenibles para la organización, perdurables en el tiempo. Los consultores artesanos no debeis poner encima de la mesa "pan para hoy y hambre para mañana". Así que, como bien dice Carme, sostenibilidad y responsabilidad son dos términos que van de la mano.
Y aunque va ligado a "artessanía" y otros términos que propones, encuentro a faltar alguno que defina la posición respecto al trabajo que desarrollarás. Me explico: para mi un consultor artesano debería ser un compañero de viaje mientras dura la aventura. No quiero alguien que lleve la carga, no quiero alguien que asuma los "marrones" que debería asumir yo misma. Cuando buscas un profesional con este perfil quieres alguien que esté a tu lado (no al otro lado de la mesa), que comparta en gran grado la realidad, los problemas y las soluciones, me atrevería a afirmar como si fueran propios. ¿Acompañamiento? ¿Empatía? ¿Esa responsabilidad de la que hablais? No sé, habrá que darle vueltas al tema.
Una gran declaración de principios. Se ve que se teda bien adobar albóndigas. ;-)
Estas reflexiones sobre lo que uno quiere y está dispuesto a hacer nunca tienen desperdicio...
ResponderEliminarYa que sale el tema, quizás algún día nos tengamos que poner un poco más en detalle con esa definición de "artesanía consultora", en al que percibo grandes diferencias segun "artesanos". A ver si estamos cayendo en la artesanolabia¡
Objeto de un post? :-)
Cierto con lo de la INMEDIATEZ. Puede llevar fácilmente al concepto de consultorapagafuegos y que es para todos harto conocido. Yo me refería más a “oportunidad” entendida como “en el tiempo necesario”… pero, si os parece, creo que podemos prescindir totalmente de enunciar este valor, ahora mismo ya no lo encuentro crítico.
ResponderEliminarRespecto a la UTILIDAD, darla por sobreentendida me parece peligroso, sobran casos donde el trabajo es inútil (demasiados casos diría yo). Además, el único sitio que conozco donde un valor “se le supone” es en el ejército y, para mí, puede seguir quedándose ahí…
Por UTILIDAD entiendo incluso quitarle a alguien la idea de la cabeza… por inútil. Quien determina la UTILIDAD es quien utiliza, en este caso, la pelota está en el tejado del cliente. De todas formas y siguiendo la propuesta de mkl casi prefiero el valor de la HONESTIDAD para ilustrar este concepto pero matizando la definición: Ofrecer lo que podemos hacer y derivar a quién pueda lo que no alcanzamos a hacer.
Coincido también en que SOSTENIBILIDAD es una palabra demasiado de moda y que, de aquí a nada, estará absolutamente gastada. Seguramente me influye el hecho de mis estancias en La Garrotxa que, como sabéis, sigue escrupulosamente la Carta Europea de Turismo Sostenible. Pero RESPONSABILIDAD a secas es muy general y no se si deja claro el enfoque que se le quería dar...aunque me gusta eh?
En este sentido, me parece de lo más interesante y aclaratorio el apunte de Carme. La complementariedad propuesta por Carme y por Anna entre sostenibilidad y responsabilidad me hacen pensar en un palabro como SOSTENPONSABILIDAD...seguro que no lo utiliza ni dios :-D
Respecto al último comentario de Anna me recuerda a una conversación donde se planteaba si el/la consultor/a trabajaban EN o PARA la organización. Es cierto que este compromiso es importante y que le dedicamos muchas calorías pero…como ¿llamarlo? Empatía me parece muy etéreo y acompañamiento un poco manido…tienes razón Anna, hemos de darle una vuelta más.
¡¡¡Bravo!!! Jamás había tenido tanta colaboración, en tan poco tiempo y en fin de semana! Gracias.
@ Alfonso: No acierto a entender el sentido de tu comentario. Desde mi punto de vista merece la pena invertir el tiempo necesario en construir una base filosófica (en el sentido estricto de la palabra ¿eh?), de la que se derive unos criterios y una metodología de trabajo que orienten la prestación de unos servicios determinados. También es cierto que no se suele hacer, pero no vayamos a seguir, a estas alturas, los modelos al uso. Ya se sabe que se empiezan multitud de casas por el tejado.
ResponderEliminarDe todas maneras creo que estas reflexiones no son para definir lo que quiero o pretendo hacer sino para formalizar lo que, humildemente, creo que ya hago. Me gustaría poder evaluarlo…
De acuerdo con lo de definir la consultoría artesana, de ahí la idea de construir entre tod@s un manifiesto. Yo, de momento, me guío por la definición de artesano que nos da la Wikipedia: “Contrariamente a los comerciantes, el artesano no se dedica a la reventa de artículos sino que los hace él mismo o les agrega algún valor.”
Pues no sé, Manel, releo mi comentario y no le veo dobleces. Quería decir que alabo tu autoreflexión y que pensar sobre lo que uno hace y valora "nunca tiene desperdicio" y nunca sobra. Has entendido otra cosa? Sorry, a veces creo que pongo comentarios un tanto prolijos y otras, por lo que se ve, me quedo corto¡
ResponderEliminarY la definición de la Wikipedia me parece un excelente punto de partida para avanzar en el termino consultoría artesana. Ya Julen tiene bastante escrito sobre el asunto.
Ya le he dado un vistazo a los materiales de Julen... Jo! todo un gurú en la matéria :-D
ResponderEliminarNos leemos, un abrazo!
Me sumo a la Sociedad Virtual de Consultores Artesanos, (No artesanos consultores como dijo Yoriento. Me imagino a un sastre dando clases). Creo que trabajar desde la realidad de cada empresa y darles un valor agregado, es una de las cosas mas inteligentes que he escuchado últimamente. La lista, igualmente, pienso que no tiene desperdicio. Si me permites, la pego en mi blog para establecer allá un foro de discusión.
ResponderEliminarPiensa en la idea de agruparnos en un sitio virtual colaborativo, quizá un grupo de google?
Un abrazo,
Alberto